El consorcio Salience-Pioneer ha sido seleccionado para llevar a cabo un estudio de factibilidad que evaluará la viabilidad de instalar un cable submarino de fibra óptica entre Chile y la Antártida. Este proyecto, conocido como «Cable Antártico», es impulsado por la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel) en colaboración con la Gobernación de Magallanes y la CAF – Banco de Desarrollo para América Latina y el Caribe.
El objetivo principal de esta iniciativa es mejorar la conectividad en el continente antártico, facilitando la transmisión de grandes volúmenes de datos a alta velocidad y fortaleciendo la infraestructura digital de Chile. El estudio abarcará aspectos técnicos, ambientales, legales, financieros y económicos, y se espera que esté completado en un plazo de 16 meses.
El subsecretario de Telecomunicaciones, Claudio Araya, destacó la relevancia del proyecto al señalar que «las telecomunicaciones y la digitalización son motores fundamentales de crecimiento, y conectar el territorio antártico al resto del mundo fortalecerá nuestra plataforma tecnológica».
Por su parte, el gobernador regional de Magallanes y de la Antártica Chilena, Jorge Flies Añón, subrayó la importancia de la conectividad para la región, afirmando que «Magallanes, por su lejanía y aislamiento, necesita estar mejor conectada. Nuestro objetivo es extender esta conexión hasta la península antártica, lo que permitirá a Chile apoyar a los 23 países que colaboran con nosotros en el Continente Blanco».
La implementación de este cable submarino posicionaría a Chile como una puerta de entrada digital al territorio antártico, mejorando la comunicación para científicos, personal militar y civil en las bases antárticas, y potenciando la investigación en este laboratorio natural.
Este proyecto se enmarca en los esfuerzos del gobierno chileno por consolidar al país como un polo de atracción para la industria de centros de datos en América Latina, asegurando un crecimiento sustentable en términos de consumo energético e hídrico, y fomentando la creación de infraestructura tecnológica avanzada.
Con la adjudicación de este estudio de factibilidad, Chile da un paso significativo hacia la integración digital con la Antártida, fortaleciendo su soberanía en infraestructura digital y su compromiso con la investigación científica en el continente blanco.